Escudo Oficial

Pregón de Fiestas San Lorenzo 2010

Pronunciado por Francisco Martín García (Paco)


( Audio con sonido de ambiente )

No sé quién ha decidido que el Pregón de este año lo lea la Peña El Lagarto. Y como todos no pueden hablar al mismo tiempo, pensaron que sea un socio el que lo lea en nombre de todos.

Por tanto leeré este Pregón en nombre de toda la Peña, de manera que, tanto si os agrada, como si vais a tirar tomates, la responsabilidad será de la Peña El Lagarto y no del que lo está leyendo que, no entiendo por qué han tenido que mirar para mi a la hora de tomar esta decisión, ya que estas responsabilidades suelen  asignarse a gente que haya destacado con algún mérito, y no veo que en mi caso se cumpla esta condición. Pues pienso que aquí habrá gente con mas meritos y que lo harían mucho mejor.

Dicen  los que pronuncian los pregones en las fiestas,  que es un honor muy importante, tener esta oportunidad.

Bien: pues esta Peña El Lagarto, también se siente muy honrada y vamos a dar comienzo  a las Fiestas Patronales de San Lorenzo en nuestro pueblo de Zarza de Pumareda.

Nuestro pueblo entre otras virtudes,  tiene la  de acoger amablemente a todos los que vienen de fuera.

Si alguien de fuera está aquí invitado a pasar estos días va a poder comprobar, lo amable y acogedora que es la gente de este pueblo.

Esto es así. Vosotros mismos lo vais a comprobar, de la misma manera que lo comprobaron los maridos que se casaron con mujeres hijas de este pueblo, y que hoy están perfectamente integrados porque nunca fueron forasteros.

Lo mismo ocurre con los hombres hijos del pueblo que se casaron con mujeres de otros lugares, y que llevan disfrutando y divirtiéndose en el pueblo como los que más, hasta el punto de que nos superan en ganas de organizar fiestas.

Entre los miembros de nuestra Peña tenemos varios ejemplos de ambos casos. Y alguno de éstos son los más ruidosos.

A los que estáis fuera, esta Peña os anima a que no dejéis de venir con vuestros hijos, año tras año a participar de las  fiestas.

A vuestros hijos, decirle que tiréis de vuestros padres para que,  siempre que puedan, os traigan  al pueblo y  que podáis descubrir las bondades y tranquilidad que aquí se vive.

Que os traigan en estas fiestas pero que también os traigan de vez en cuando para visitar a los abuelos del pueblo, porque además sois los que tenéis que tomar el relevo para continuar organizando estas fiestas y que no desaparezcan nunca, ya que aquí cada vez somos menos.

El año pasado estaban entre nosotros 4 personas mas que este año ya no están. Solo en el mes de mayo tuvimos que ir hasta tres veces al cementerio.

Veniros por aquí el Jueves Merendero, los días del Hornazo, a principios de primavera, estación que por aquí se adelanta.

Así descubriréis cómo se comporta la naturaleza en esta zona. Escucharéis en el campo  como canta el cuco, como canta la aceitunera, veréis y oleréis los espineros en flor, y veréis qué explosión de colorido se produce en la vegetación después del aletargamiento del invierno.

Aquí estaréis muy bien.  Además el Ayuntamiento ha puesto internet, para que os sintáis como en vuestra ciudad.

También el Ayuntamiento inaugura la deseada Casa Rural. Esto es importante, porque aparte del propio servicio a que se destina, nuestro pueblo desde ahora figurará en los mapas turísticos de la zona, como un lugar de alojamiento para gente de paso o quiera permanecer entre nosotros.

Otra de las virtudes de la gente de nuestro pueblo es que es muy trabajadora.

Cuantos sudores habrán  dejado en el campo nuestros antepasados más recientes para levantar la gran cantidad de paredes y cercar las parcelas que se trabajaban antes de la concentración parcelaria. Concentración recientemente estrenada.

Como se arreglarían para colocar alguno de los enormes pedruscos sin ayudas mecánicas.

Solo podían utilizar la fuerza humana, y ayudarse de la fuerza animal y la inteligencia.

A los maestros de las paredes le oímos decir muchas veces que para mover las piedras valía mas la maña que la fuerza.

Además de trabajadores, eran artistas de la construcción, pues hay que fijarse también en alguna de las  entradas a  fincas que hicieron con piedras en forma de arco, así como las cabañas de piedra que encontramos por cualquier parte del término.

Otra forma distinguida de arquitectura eran los tejadillos que construían encima de los portones de entrada a alguno de los corrales que hay aquí en el pueblo.

Esta distinción  entre unos  corrales y otros se interpretaba como un signo de riqueza de sus propietarios. 

Una virtud  a destacar de nuestros mas recientes antepasados, es el buen humor que tenían:

Yo me acuerdo de cuando era pequeño que al salir de la escuela por la tarde, mi madre me decía:

Anda hijo; deja aquí el cabás  y vete a casa de abuelo que han traído un carro de leña y le ayudas a cortarla.

Yo iba de muy buena gana entre otras cosas porque mi abuela me daba de merendar chorizo de matanza casera con pan hecho en casa.

¡Qué chorizos se curaban en la cocina de mi abuela!. Recuerdo aquellos sabores que nunca volveré a probar ni en los mejores restaurantes.

Era muy divertido ir porque un rato antes del oscurecer iban llegando del campo los vecinos y entablaban las tertulias llenas de buen humor.

Tapabocas al hombro  y cayada en mano llegaba el tío Eduardo que vivía enfrente y, que tenía la facultad de hacer un chascarrillo con cada frase que pronunciaba. Lo primero que hacía era meterse con mi abuelo diciéndole:

 

“¡Coño! José, bien te podrás reír que tienes aquí el muchacho cortándote la leña, con el buen vagar que tienes tú de hacerlo”.

Mira Eduardo: deja en paz a rapá  y no te metas conmigo que ya sabes que siempre que me apuestas algo termino ganándote.

Bueno, bueno. Eso lo dirás tú. Pero cuando quieras te hecho un palancón.

Enseguida hacían una raya en el suelo y ya estaban tirando el palancón a ver quien lo lanzaba más lejos.

Luego llegaba el tío Aniceto que vendría de jugar la partida envolviendo un cigarro de picadura de cuarterón.

Venga Aniceto: tira el  palancón a ver si nos ganas. 

Estáis buenos cacharros vosotros  pa andar con estas cosas. Tener cuidado no vayáis a tropezar con alguna gajuma

Al mismo tiempo y por el otro lado de la calle, aparecía el tío Angelín que venía de la panadería.

A este si que no le faltaba el buen humor.

¿Estáis tirando al palancón?  Esa raya está muy cerca. Hay que tirar de más lejos. (la cosa era desmoralizar  al contrario)

Una vez terminada la serie de lanzamientos ninguno había superado la raya. Todos habían quedado muy por debajo.

Luego  justificaban el fracaso y terminaban apostándoselas  a otra cosa.

¡El domingo te la echo a la brisca¡. Te vas a enterar.

 En otra ocasión estaba el tío Eduardo cuidando las ovejas por la zona de Valdemayas y apareció por allí el tío Angelin, con su baja estatura pero de muy alta y distinguida categoría entre la gente del pueblo.

El perro pastor del tío Eduardo (que como todos los perros tienen que husmearlo todo), se acercó a él, le olió los zapatos y le hecho una meada sobre el pantalón.

El tío Angelín que no salía de su asombro ante lo sucedido le recriminó al tío Eduardo el comportamiento del perro diciéndole:

Eduardo: ¿Cómo tienes un perro tan mal educado  que ha venido a mearme los pantalones?.

Y le contesta el tío Eduardo:

Coño Ángel: perdónalo hombre. Es que te ha visto tan alto que te ha confundido con un poste de la luz.

Otro caso que vale la pena recordar en esta línea de buen humor, es el que protagonizó el tío Marcos que, su burro había sido pillado in fraganti comiendo en la hoja y fue detenido por el meseguero y recluido en el Corral Concejo, a la espera de que su dueño fuera a liberarlo previo pago de la sanción correspondiente.

El corral concejo lugar donde el meseguero encerraba a los animales que veía pasteando en sitios acotados, tenia unas paredes altas para asegurar que éstos  no pudieran escapar.

El tío Marcos para librarse de pagar la sanción fue al Corral Concejo cuando nadie lo veía, saltó la tapia, cogió a su burro en brazos y se las arregló para tirarlo por encima de la pared a la calle y desaparecieron los dos.

Caso parecido ocurrió con el tío Jesús el carnicero (que era nieto del tío Marcos), cuando tenía que pasar el puente de Robledo con su burro y al animal le daba miedo. Se espantaba y no había manera de que cruzara ni a palos.

Después de varios intentos, al tío Jesús se le acabó la paciencia y le dijo al burro: “A burro me ganaras, pero a fuerza te gano yo”.

Se metió bajo la barriga del burro, lo cargó a hombros y lo trasladó al otro lado del puente, con lo cual  pudo continuar su viaje.

-Este último caso parece que no lo confirma nadie como verdadero (por lo menos la gente que yo he hablado), pero de cualquier manera los rumores circulan así, y el suceso encaja perfectamente en este personaje, que era un hombre muy fortachón, sincero y noble.- Además era nieto del tío Marcos. De raza le viene al galgo.

Aunque resulte raro, estas cosas  que parecen chascarrillos y, que amanitos quedan, han ocurrido en nuestro pueblo, porque aquí ha existido gente con muy buen humor, gente muy trabajadora, con mucha fuerza y con mucha amabilidad.

Por eso no podemos olvidar que nuestro pueblo tiene mucha mas importancia de la que dedicamos rutinariamente a nuestras ocupaciones diarias.

Así es que:

  Desde el Candeneo a la Berzosa

  Desde el Cimero hasta la Rebollera.

  Desde el puente Robleo hasta el Bardialón

  Y desde las Espundias hasta el Fayal

  Viva la Zarza de Pumareda y su término municipal.

  ¡Viva San Lorenzo!

  ¡Y Viva nuestra Fiesta Patronal.!

  (Muchísimas gracias)