EL SACERDOTE ESPAÑOL ENCUENTRA DIFICULTADES PARA AMBIENTARSE EN AMÉRICA

A LOS SEMINARISTAS NATIVOS SE LES PROPORCIONA UNA EDUCACIÓN EUROPEA

César Martín Calvo, sacerdote salmantino, saldrá próximamente para Sudamérica (más)

 César Martín Calvo, es un sacerdote de la diócesis de Salamanca que este año partirá para el Seminario de Asunción, Paraguay. Allí estará como profesor. Tiene 25 años y entró en el Seminario de Salamanca a los doce. Ha estudiado cinco años de Humanidades, un curso preparatorio y tres años de Filosofía en la Universidad Pontificia de Salamanca. Además es licenciado en Teología.

-Ahora he acabado un cursillo de ambientación, de dos meses y medio, organizado por la O.C.S.H.A. (Órgano de Cooperación Sacerdotal Hispano-Americana)

-¿En qué ha consistido dicho cursillo?

-Nos han dado una serie de conferencias, tanto seglares como sacerdotes, sobre los problemas religiosos, políticos y sociales de los pueblos hispano-americanos. Y como ejercicios prácticos hemos tenido "revisiones de vida" y modo de llevarlas a cabo en orden a formar equipos sacerdotales.

-¿Es necesaria una vocación sacerdotal especial para ir a las misiones americanas?

- No. El sacerdocio es universal. Todos los sacerdotes hemos de estar dispuestos a servir a la Iglesia donde lo necesite.

LA LLAMADA ES FUERTE

-Si no se necesita una vocación especial, ¿es necesaria una disposición o unas aptitudes adecuadas a la labor a realizar?

-Tomando conciencia de la realidad del Cuerpo Místico de la Iglesia, en el cual todos dependemos de todos, la llamada de Dios se ha de sentir muy fuerte y no podemos menos de escucharla, si somos consecuentes.

- ¿Cómo hacen para ir a Hispanoamérica?

-Por medio de la O.C.S.H.A. Desde el año 1949 funciona en España dicho Órgano, el cual está en comunicación directa con los obispos de Hispanoamérica. La O.C.S.H.A. atiende a las necesidades sacerdotales de una manera racional, valiéndose de estadísticas completísimas de la situación en aquellos países. Y los sacerdotes seculares, cuando quieren ir, se ponen en comunicación con el mencionado Órgano de Cooperación Sacerdotal Hispano-Americana.

-¿Tiempo mínimo de estancia?

-Salvo enfermedades o casos excepcionales, el sacerdote firma un contrato por cinco años, que puede renovarse con el consentimiento del Prelado receptor, esto es, del Obispo de la diócesis americana, del Prelado del que depende el sacerdote de la O.C.S.H.A. y, naturalmente, del propio sacerdote.

UN CURSILLO DE AMBIENTACIÓN

-¿Necesitan tener algunos estudios especiales?

-Simplemente la carrera ordinaria del sacerdocio y el cursillo de ambientación que realizamos antes de partir.

-¿Principales peligros que encuentra el sacerdote español en las tierras americanes?

-El ambiente y la adaptación. Existe un ambiente mucho menos cristiano que en España, por lo que la O.C.S.H.A. exige que se trabaje en equipos, como mínimo de dos sacerdotes, para que no se sientan desbordados. Y en cuanto a la adaptación, hay que tener en cuenta que es una mentalidad y forma de vida distintas las que tienen los sudamericanos.

-¿Cuál es la actitud de los hispanoamericanos respecto a los sacerdotes españoles?

-Nos acogen con cariño, como hermanos de sangre que somos.

EDUCACIÓN A LA EUROPEA

-¿Problemas que surgen en los seminarios sudamericanos?

-Debido a la dificultad de adaptación, y como los profesores suelen ser españoles o europeos, se les proporciona a los seminaristas nativos una educación a la europea. Es posible que la escasa perseverancia de éstos encuentre en la inadaptación una de sus causas.

-¿Hay otros países que colaboren en la labor sacerdotal para Hispanoamérica?

-Sí. En Lovaina, Bélgica, funciona desde el año 1954 el Colegio Pro América Latina, y ha enviado en estos seis años unos 50 sacerdotes, principalmente belgas, holandeses y algún luxemburgués. Además hay que destacar la colaboración de Estados Unidos y Canadá, que se han preocupado de este problema, enviando o proporcionando personal y dinero.

Juan  F: SARDAÑA

1960

 

 

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