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J.Á.M
¿Cuántos años ha estado al frente del Grupo Carcoma? Ocho
años: Es el grupo que más ha perdurado en el instituto. Pero llegó
su final. Al dejar yo el centro desaparece el grupo.
¿No hay posibilidad de que
continúe el grupo? Es muy difícil. Hay que echarle muchísimas
horas tiempo y eso es complicado. Tampoco resulta fácil hacer teatro
con chavales de instituto.
¿No ha podido encontrar un
sustituto que tome las riendas? Hay un profesor que continúa
haciendo teatro, pero su propuesta es diferente. No sé si vendrá
alguien nuevo que desee tomar las riendas.
¿No le da pena que se pierda
esta tradición? Sí, sí. Me da mucha pena. Pero la vida sigue;
son etapas.
¿Qué han supuesto estos ocho
años? Lo hago porque creo que es una labor didáctica y les ayuda
a crecer. Nunca lo he hecho por los premios ni los reconocimientos.
Es cierto que me ha dado muchas satisfacciones, pero también
decepciones. |
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¿Que le animó a embarcarse en este aventura?
Hace unos años se organizó en el centro un
curso de teatro para profesores y me lancé. Empecé a dirigir y me di
cuenta de que servía para este cometido.
Ahora que llega la jubilación,
¿cómo va a llenar este vacío? Tengo varios proyectos. No me voy
a aburrir.
¿No se le ha pasado por la
mente formar un grupo aficionado? De momento, no; aunque es algo
que no descarto. Ya se verá. No renuncio a nada. |
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"Hacer teatro con chavales de instituto no resulta nada
fácil; en estos ocho años me ha dado muchas satisfacciones, aunque
también algunas decepciones"
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¿El teatro es como una droga?
Engancha. Pero no lo es todo. En la vida hay otras cosas,
aunque realmente sí me gustaría mucho continuar.
¿Lo haría en Alba o en
Salamanca? En Salamanca. Aquí tengo mi vida. Aunque Alba ha
dejado en mí un recuerdo imborrable.
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